Nuestro fundador el padre Tomás Agustín Judge (1868-1933), sacerdote católico vicentino, llamó cenáculos a los grupos de hombres y mujeres, que se reunían para pedir en oración la guía del Espíritu Santo antes de salir a su misión apostólica.
La palabra cenáculo significa aposento alto, y hace referencia a la habitación donde Jesucristo celebró la última cena con sus amigos (el Jueves Santo) y donde los discípulos, junto con María y otros hombres y mujeres recibieron el Espíritu Santo (en Pentecostés).
![](https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgFsiO5_mfPRtvHUlrmiHyLHtgaIo77lW79UvubZhQUlAlyMhj39NQFq6eRJKBp_OUWXfR_bkC3YePHnBAi98eYq8M-tb4PeK42pi8X0BQypTi5Z1LiNqr8SY-92iN8PecyQBwgiyT9Ico/s400/Estructura+ACM.jpg)
Cada Cenáculo Local tiene un(a) custodio(a) quien cuida "el fuego", coordinando los trabajos apostólicos, convocando a las reuniones, y creando un espíritu de comunidad. El/la custodio(a) cuenta con un(a) asistente en esta labor. Además, el/la guía espiritual promueve la formación y crecimiento espiritual de los miembros.
Los cenáculos locales se organizan por Áreas, para apoyarse en la formación, comunicación y trabajos apostólicos. Estos a su vez forman Regiones.
Administrativamente las Regiones son áreas geográficas grandes que contienen varios cenáculos activos. Actualmente el ACM se compone de seis (6) regiones.
De esta forma, a nivel Local, de Área, Regional y General, existe una organización que garantiza la buena comunicación. Los custodios(as) son electos por los miembros del cenáculo, sus detalles se especifican en las Normas y políticas del ACM.
De esta forma, a nivel Local, de Área, Regional y General, existe una organización que garantiza la buena comunicación. Los custodios(as) son electos por los miembros del cenáculo, sus detalles se especifican en las Normas y políticas del ACM.